En una vida social cada vez más exigente desde el punto de vista de la belleza, a veces es difícil aceptar ciertos hechos como la edad.
No obstante, hoy en día existen varias soluciones para remediarlo, a saber, la inyección de bótox y la intervención quirúrgica.
El botox o toxina botulínica corrige las pequeñas arrugas localizadas en los labios, las mejillas y la frente. su desventaja es que no es suficientemente duradero y requiere nuevas inyecciones cada 12 meses. El ácido hialurónico (AH), por su parte, confiere al rostro un aspecto voluminoso. Para un efecto más duradero, se utiliza Gore-Tex para borrar las arrugas más profundas.
Por último, el lifting corrige la flacidez facial y tensa el tejido muscular. Requiere incisiones para dar al rostro un aspecto más juvenil.