Un masaje calmante y drenante favorece la circulación sanguínea en la superficie de la piel del rostro, cataliza la eliminación de impurezas subcutáneas, revitaliza los tejidos y tonifica los músculos flácidos.
Una vez a la semana es un buen ritmo para esta “gimnasia”. Empezar siempre por la parte inferior del rostro, trabajando la crema o el jabón para suavizarlo y calentarlo. Haga seis movimientos hacia arriba y hacia fuera, sin tocar alrededor de los ojos.
- Poniendo la mano izquierda en la base del cuello, suba por el lado derecho hacia la barbilla, con un movimiento circular seguro. Repita con la mano derecha en el lado izquierdo del cuello.
- Con el dorso de ambas manos, dé unos golpecitos debajo de la barbilla, alternando. Relaje las manos.
- Ponga el dedo corazón de cada mano en la punta de la barbilla y haga movimientos circulares alrededor de la boca hasta llegar a la nariz, luego deslice rápidamente sobre los pómulos.
- Ponga los dedos corazón de ambas manos en una mejilla. Dar golpecitos enérgicos hacia arriba y, a continuación, hacer lo mismo en la otra mejilla.
- Con ambas manos, dar golpecitos en el centro de la nariz, entre las cejas, y deslizar suavemente por la frente hasta llegar a las sienes.
- Pasar crema o jabón por la frente con movimientos giratorios de ambas manos.
Cómo proceder
No basta con aplicar productos de cuidado a tu piel para mejorar la estética de tu rostro, es importante que no la maltrates mientras lo haces. Los jabones, lociones, leches limpiadoras y cremas nutritivas deben aplicarse en el rostro con sumo cuidado, para no anular sus efectos beneficiosos. No se frote la cara ni tire de la piel. Si eres consciente de hacerlo, intenta suavizar tus movimientos. En lugar de extenderte montones de crema por la cara, que sale caro, coge un poco en el dedo corazón de cada mano y aprende a aplicártela en pequeños toques por todo el rostro.
Cachete: nunca apliques colorete sobre la piel desnuda “Aplica siempre antes una crema de día que te permita extender el colorete fácilmente sin tirar de la piel”. Alrededor de los ojos: para aplicar la crema sobre la delicada piel de debajo del ojo, utiliza el dedo corazón o el anular. Mira hacia arriba y aplica la crema en pequeños toques. Aplícalo pasando el dedo una vez hacia la esquina exterior del ojo y luego hacia la esquina interior. Termine con una serie de pequeños movimientos circulares en la esquina exterior de cada ojo. Si desea disimular ojeras o bolsas, aplique el producto en pequeños toques, espere uno o dos minutos a que se caliente al contacto con la piel y, a continuación, extiéndalo. También puedes aplicarla con un pincel pequeño.
El cuello: cuando apliques una crema nutritiva en la garganta, asegúrate de extenderla hacia arriba y hacia los lados, para levantar y reafirmar la piel.